De mortuis, nihil nisi bonum, reza el proverbio latino: de los muertos hablarás sólo bien. Adolfo Aguilar Zínser falleció hace diecisiete años, y prefiero recordar los largos y magníficos ratos juntos que los que no lo fueron. Pero su desempeño en el Consejo de Seguridad de la ONU en torno a la Guerra de Irak de 2003 constituye una interesante analogía con la conducta de López Obrador en estos días ante la Cumbre de las Américas.