El tiempo ya se cuenta por semanas. El final es un abismo y se acerca. Él sabe que ha fallado. Por más que, en ocasiones, parezca vivir en otro planeta, sabe lo que ha ocurrido y está ocurriendo. Su gestión no soporta el juicio de la historia. Por eso no quiere llegar ahí. La desesperación se ha apoderado de él. Tiene que fugarse, sin
mirar atrás.