Agonizan unas primarias insípidas que dejan varias lecciones: la inseguridad será el eje de las campañas, pero, en ese asunto, los aspirantes de Morena están atenazados por una férrea censura y los opositores han desaprovechado su libertad para hacer diagnósticos y propuestas de mayor profundidad.
Claudia Sheinbaum y Marcelo Ebrard, los aspirantes de Morena mejor posicionados, dicen poquísimo sobre lo que han hecho y lo que piensan hacer para combatir la inseguridad. Abordan el asunto con enorme cuidado invocando las prohibiciones de la ley electoral, cuando pesa la instrucción presidencial de que no debatan y el cuidado que tienen de no empañar el triunfalismo de Palacio en asuntos de seguridad.