La trampa
Para
AMLO, las obras públicas deben ser terminadas durante el sexenio. Le gustan las
inauguraciones y su sucesor las puede cancelar si se quedan a medias o no le
gustan. Lo sabe.
Empresas extorsionadas, empresarios entregados
Sabemos todos que los supuestos esfuerzos de “convencimiento” del gobierno de la 4T son una mentira. Esto es especialmente cierto con los empresarios. López Obrador no los “convence” de nada. Los extorsiona, los intimida, los amenaza y los obliga a actuar de una forma que no corresponde a sus intereses, pero a la que han decidido no negarse, por miedo, por prudencia o por debilidad ontológica.
Cada día le cuesta más trabajo a AMLO cumplirle a Biden, y a Biden cumplirle a AMLO
La administración de Joe Biden enfrenta un buen número de retos en política exterior, al cumplir pronto 18 meses en la Casa Blanca. El principal reside, por supuesto, en la invasión rusa a Ucrania: el presidente de Estados Unidos no solo debe responder a la agresión
Cuba: es lo que hay
Existen tres posibles explicaciones de las caravanas que le brindó López Obrador a la dictadura cubana durante su visita. Nada de lo que dijo o hizo tiene mucho sentido en sí mismo.
¿AGACHADOS?
¿Qué será de México en la próxima década? Quien desee gobernar tendrá que hacer una firme alianza de partidos, ya está en el horizonte, pero sobre todo aliarse con un actor mucho más poderoso y popular: el sentido común.
Costos
Es
muy difícil enfrentar un problema inflacionario producto de un aumento en el
precio internacional de las materias primas, sobre todo en una economía tan
abierta como la mexicana. Pero también es muy difícil no hacer nada.
Pinches noruegos corruptos
En un país con nula historia de competencia electoral (25 años no son nada), es lógico que no se hayan arraigado las mejores prácticas de la democracia representativa. Se entiende que los viejos vicios priistas perduren; sus antídotos no han ingresado de lleno al organismo social mexicano.
Un nuevo frente con Estados Unidos: el amiguito cubano de AMLO en Los Ángeles
Entre la conversación que sostuvieron el viernes pasado Biden y López Obrador, y el viaje hoy del secretario de Relaciones a Washington, junto con las obvias dificultades recientes con Estados Unidos, podemos deducir que México tiene hoy varios frentes abiertos con nuestro vecino. Unos no surgen de circunstancias en nuestras manos; otros provienen de obsesiones o errores del gobierno.
No distraerse con reformitas electorales
Macario Schettino tiene toda la razón. Es absurdo ponerse a discutir los detalles, los pros y los contras, y las implicaciones incluso de una reforma electoral que nunca se volverá ley. Se trata evidentemente de una distracción más del gobierno para enfocar el debate nacional en tecnicismos insignificantes, en lugar de centrarse en el patético conjunto de resultados reales de los ya casi cuatro años de gobierno, sobre todo si aceptamos que todo empezó en julio del 2018.
¿O SERÁ UN INCENDIO?
¿Cómo se imaginó el final? ¿De verdad creía que sus estrategias conducirían a una mejoría? ¿O fue ingenuidad y no calculó los efectos de sus palabras y actos? ¿Pero, y su astucia?